Si bien, aún no tenemos una masificación de delitos informáticos, la tendencia indica que van subiendo y se necesitan tomar acciones preventivas entre sector público y privado.
Nuestro país requiere actualizar su legislación en materia de delitos informático que data de 1993, es necesario actualizar las figuras penales existentes y cubrir varias acciones que hoy no están tipificadas.