Un interesante artículo fue publicado este domingo en El Mercurio de Santiago sobre los que está enfrentando el Banco de Chile,
El ataque sufrido hacce unas semanas a uno de los dos bancos más importantes de Chile sufrió el ataque de un virus informático afectando sus operaciones donde 9.000 terminales computacionales dejaron de operar dejando de prestar servicio y teniendo que cerrar sus sucursales por no poder operar. Este hecho fue la más clara manifestación de continuidad de negocio y el impacto en las operaciones de la institución. Esta falla fue detectada el jueves24 de mayo que impactó la atención de sucursales, banca telefónica y otros servicios. Al día siguiente, viernes 25 de mayo, continuaban los problemas y el banco manifestaba que seguía trabajando en la reposición de los sistemas para solucionar la contingencia que se estaba enfrentando. El lunes 28 de mayo se confirmó que el origen fue un virus informático.
No ha sido fácil la puesta en marcha de los sistema y estresó a un alto nivel a la institución que tuvo que hacer grandes esfuerzos para superar la crisis a tal punto que su Presidente incluso por redes sociales señaló “presentamos intermitencias, estamos trabajando en regularizar nuestros servicios de portal internet y aplicaciones móviles”.
El relato de los hechos describe las acciones ocurridas los primeros días del ataque, hoy con una perspectiva de más días, podemos señalar que la investigación que realice el regulador (Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras) es vital, de hecho el 29 de mayo señaló que el banco enfrentó un ataque de virus informático, monitoreó la situación para revisar la magnitud de ésta, el impacto y las acciones desarrolladas por el Banco.
Estas situaciones deben llevar a reflexionar a las empresas y también a las instituciones para prepararse a los nuevos entornos frente a las crisis por la continuidad operacional, hoy los sistemas informáticos son la herramienta básica para prestas servicios a los clientes y los mecanismos de protección tanto en hardware, software y la capacitación permanente de personas son relevantes al momento de enfrentar estas crisis.