Un total de cinco requerimientos de colaboración internacional se encuentra afinando el Ministerio Público chileno para determinar el tipo de organizaciones criminales que hay detrás de las masivas estafas cibernéticas que han sufrido clientes de bancos a través de las modalidades de phishing y pharming.
El primero consiste en obtener datos personales y claves de acceso a cuentas corrientes, a través de correos electrónicos o ventanas emergentes que simulan dar acceso a páginas web de entidades bancarias. Tras ello, los delincuentes retiran sus fondos y los envían al extranjero.
El segundo delito corresponde a un virus informático que redirecciona las páginas web de los bancos y remite los antecedentes de los afectados a un tercero que gira el dinero a una cuenta personal y luego la reenvía fuera del país.
Investigación
Si bien estos delitos se masificaron en Chile desde mediados del 2009, la Fiscalía Centro Norte (a cargo de indagar este ilícito a nivel nacional) inició desde mayo del 2010 más de 880 investigaciones por un monto superior a los $ 2.500 millones.
Las pericias, que ha llevado a cabo el fiscal de delitos económicos Luis Inostroza, arrojaron que el destino de esos fondos defraudados a clientes chilenos han sido derivados a México, Colombia, Venezuela, Perú y, recientemente, a San Petersburgo, en Rusia.
Ante ello, el equipo investigador ya solicitó antecedentes a las policías de estos cinco países para dar con los líderes de estas bandas criminales que, se presume, estarían ligadas al narcotráfico o terrorismo.
“País atractivo”
Debido a la gran cantidad de víctimas, la fiscalía formalizó a 22 presuntos integrantes de distintas organizaciones dedicadas a reclutar a chilenos para que faciliten sus cuentas corrientes y luego transfieran el dinero a alguno de los cinco países. Por estos delitos sólo cuatro imputados se mantienen en prisión preventiva.
Las organizaciones criminales han reclutado a más de 200 personas en Chile a fin de que faciliten sus cuentas bancarias para depositar los dineros defraudados, por lo que la fiscalía también los está investigando como cómplices.