Nuestra clase política tiene puestos sus ojos en la elección presidencial que será el próximo año, esto nos debe llevar a pensar en la necesidad de enfocar nuestras necesidades en otros temas. Hoy tenemos una clase política vieja, sin renovación y sin espacios para los jóvenes, los mismos lideres que tenemos hoy son los mismos de hace 30 años (salvo escasas excepciones) cómo estos líderes serán capaces de conducirnos hacia el siglo XXI si no entienden los desafíos que presenta el nuevo mundo.
De la crisis económica que vive el mundo se generan oportunidades para nuestro país, durante las últimas semanas me he reunido con empresas de la India, Europa y Estados Unidos y todas ven con interesantes ojos las oportunidades de establecerse en Chile para desarrollar negocios y servicios desde nuestro país al mundo, pero para variar, el foco de nuestro país está centrado en la pelea chica, en las ambiciones de poder y en la ausencia de políticas que estimulen nuestro desarrollo hacia la sociedad de la información. En mi reciente viaje a Concepción dónde fui invitado por una universidad a exponer, me he dado cuento de las oportunidades que existen en esa región para ser un proveedor de servicios hacia el mundo, tienen un alto nivel de jóvenes estudiando en Educación Superior, alto nivel de empresas del área de servicios y excelente nivel de comunicaciones, porqué no mirar hacia el mundo y desarrollar alianzas y programas de desarrollo en materia de tecnologías de la información.
Los temas que necesita la ciudadanía hoy son desarrollo económico, capacidad de innovar, emprendimiento, oportunidades para estudio y trabajo para los jóvenes, etc. Son muchos los temas que nos deben llevar a la sociedad de la información y no debemos perder tiempo de lo contrario nuestro país seguirá sujeto a las alzas y a las bajas de los precios de los recursos naturales. ¿Alguien del Gobierno se preocupará de estos temas el 2009 o seguiremos marcando el paso? Espero que no, de lo contrario perderemos otro año con un Gobierno mediocre, pensando solo en mantenerse en el poder. El Gobierno debe ser una forma para servir a Chile y a su pueblo y no una forma de servir a intereses personales o político – partidario.