La tecnología blockchain ha llegado para quedarse, vemos cada vez más seguirdo como es utilziada en diferentes áreas, desde el año 2009 con la aparición del bitcoin, éste activo digital ha tomado cada vez más relevancia. Cada vez más seguidos nos  consultan sobre las ICO.  Las “Initial Coin Offering” (“ICO”) son un nuevo método que utilizan las start-ups para levantar financiación. Mediante las ICOs, los inversores participan en una nueva concepción de ronda de financiación, semejante conceptualmente al crowdfunding, transfiriendo a la start-up dinero fiduciario (FIAT), como el euro o el dólar peso, o criptomonedas, como puede ser el Bitcoin o el Litecoin, a cambio de tokens virtuales (“Tokens” o “Criptomonedas”).

Los Tokens, que pueden tomar diversas denominaciones por ejemplo: cryptodivisa, participación virtual, derecho a un bien intangible, a determinados servicios, derecho a cobro, etc.), representan un valor asociado al proyecto empresarial que los emite. Pero a diferencia de las OPAS, ofertas públicas de acciones los Tokens no generan ningún derecho u obligación como socio, como son la generación del derecho a recibir dividendos en el caso de la Sociedades Anónimas.

Su regulación a nivel mundial es dispersa y deberemos entrar a analizar caso a caso para ver que naturales jurídica tienen en esos Estados.