Los deportes electrónicos, también conocidos como esports, son competiciones de videojuegos que se han convertido en eventos de gran popularidad. Por lo general los deportes electrónicos son competiciones de videojuegos multijugador, particularmente entre jugadores profesionales. Los géneros más comunes en los videojuegos asociados a los esports son: estrategia en tiempo real, disparos en primera persona y arenas de batalla multijugador en línea (mejor conocido por sus siglas en inglés. Fuente Wikipedia.
Esta tendencia que en varios países desarrollados se ha ido profesionalizando movió recursos el 2019 superiores a los 900 millones de dólares. Hoy a nivel de países de Asia, Europa y de EE.UU los jugadores mejoran sus técnicas y se profesionalizan cada vez más. Este entorno no solo tiene su lado lúdico sino que también de generación de recursos.
Los e-sports ha dado lugar al surgimiento de distintos modelos de negocio que se van asociando a un entorno que va evolucionando desde el del ocio tecnológico-deportivo y que plantean cuestiones jurídicas muy específicas, tales como el perfil del jugado, forma jurídica de los clubes, organización de eventos, propiedad intelectual tanto propiedad industrial como derecho de autor, etc.) que cada vez más precisan de una respuesta para que tanto los jugadores como los patrocinadores tengan claridad de los alcances jurídicos del entorno que generan los e-sports. Este nuevo escenario que plantean los video juegos nos lleva a reflexionar sobre los diversos alcances que está teniendo a nivel global, particularmente en Asia, Europa y EE.UU., esta tendencia comenzará a masificarse en Latinoamérica, si bien en Brasil ya hay un interesante mercado y de eventos que involucra a distintas ligas y grupos de jugadores.
El número de auspicio está creciendo, pero también, los intereses de los jugadores y de las ligas que se van generando, todo se vuelve más competitivo pues cada uno quiere parte del universo de patrocinio que comienza a circular.
Cada uno de los patrocinadores que interviene así como de jugadores deben tener en consideración un conjunto de normas de diferentes disciplinas, tales como, derecho tributario, propiedad industrial, derecho de autor, derecho civil, derecho comercial, protección de datos, en fin, muchas son las áreas del derecho que están atentas a este nuevo contexto por las oportunidades que se generan y los recursos que están en disputa.