El coordinador del panel de expertos de telecomunicaciones ha señalado que las telecomunicaciones en Chile deben ser flexibles, esto significa que la regulación debe ser capaz de anteponerse a los cambios tecnológicos.
Se ha señalado que el marco regulatorio tiene que dar espacios a la flexibilidad para adecuarse a nuevas circunstancias. Por ejemplo, si en el futuro no es necesario regular precios, que no se cambie la ley. Lo mismo con la integración de nuevas tecnologías, a fin de que sean incorporadas por defecto.
Se ha señalado que se pretende generar acceso, así el Gobierno tiene como objetivo implementar la cobertura a la población. Tenemos más de 900.000 conexiones de banda ancha, pero están llegando solamente al segmento que puede pagar. La autoridad debe definir si la banda ancha es un servicio básico, para destinar montos estatales a quienes no pueden pagar.