Recientemente se pueden publicar sitios en internet con acento y con Ñ ello ha llevado que varias empresas o instituciones comiencen a registrar sus dominios. Pero otros se han adelantado y han comenzado a generar los conflictos de rigor.
Comienza por tanto a operar el sistema de mediación y de arbitraje establecido en el reglamento de NIC Chile.
En relación a este tema tengo algunos inconvenientes, actualmente tramito un arbitraje que ya va acumplir 1 año, lleva para sentencia varios meses y el arbitro aun no se pronuncia, y el volumen de causas que se están tramitando, al parece no dan una respuesta eficiente y eficaz a las necesidades de las personas paa resolver los temas, o será que es el arbitro quien no responde.
En el reportaje aparecido ayer domingo se hace mención a algunos de los casos que están en conflicto en Chile. Esta situación volvió a reactivar la demanda de inscripción de dominios.
fuente:El Mercurio
En circunstancias normales, NIC Chile recibe 200 solicitudes de nuevos dominios al día. Esta cifra se disparó el 21 de septiembre. Durante la primera media hora de operaciones ingresaron unas 1.000 solicitudes de inscripción con los nuevos dígitos, y después de dos horas ya llegaban a las 2.500. Tanta demanda hizo colapsar el sistema.
“Detrás de muchas de estas nuevas inscripciones están personas que han montado una verdadera industria en torno a la venta de nombres de dominio”, sentencia el abogado Fernando Castro.
El primer dominio IDN solicitado fue viña.cl, por parte de la Ilustre Municipalidad de Viña del Mar. Diversas variantes de los nombres de los candidatos presidenciales Joaquín Lavín y Sebastián Piñera fueron también ingresados por sus representantes. Curiosamente, hasta ahora no llegan peticiones para tomáshirsch.cl.
Todos los ingresos se publicaron en la página nic.cl, como establece el reglamento. A contar de entonces empezó a correr un plazo de treinta días para que se presenten solicitudes competitivas.
El 21 de octubre se adjudicaron las inscripciones que se realizaron el día que se abrió el sistema y que no recibieron ninguna solicitud competitiva. Esto previo pago de $20.170, correspondientes a la inscripción por dos años.
En aquellos casos en que se presentó competencia, NIC Chile iniciará una mediación, que es gratuita. Y “si en la mediación no es posible disipar el conflicto, se cerrará esta etapa y se abrirá la de arbitraje”, explica Margarita Valdés, directora del área legal de NIC Chile.
El abogado y académico Juan Agustín Castellón es uno de los 24 árbitros nombrados por NIC Chile. Desde abril de 2002, cuando se inició en estas lides, ha llevado adelante 272 causas. Explica que en estos procesos lleva las de ganar quien presenta la primera solicitud, pues goza de presunción de mejor derecho y buena fe en la inscripción. Además, está liberado del pago de los honorarios arbitrales.
Son los solicitantes posteriores los que deben pagar los $250 mil a $450 mil que cobra el árbitro y esforzarse por demostrar que tienen más derecho que el primero a ser propietarios del dominio en disputa.
Uno de los argumentos más contundentes para lograr que el primer solicitante pierda el dominio es demostrar que actuó en forma abusiva o de mala fe, lo que según el reglamento de NIC ocurre cuando la motivación para realizar el registro es venderlo a mayor valor que el costo de inscripción o bien perjudicar la actividad competitiva. Estos mismos argumentos se pueden utilizar para revocar un nombre de dominio ya adjudicado, porque no se presentó ninguna solicitud competitiva dentro del plazo de treinta días.
“El sistema no permite que se hagan inscripciones para aprovecharse. Tampoco las empresas ni los estudios de abogados aceptan componendas con estas personas”, asegura Castellón.
Con el argumento de que es también abusivo inscribir un dominio engañosamente similar a una marca, el año 2002 Consalud ganó un arbitraje contra quien registró isaprecansalud.cl, pese a que, según explicó después, su intención era crear un sistema de cobertura de salud para perros. Este caso demuestra que no siempre se debe presumir la mala fe.